Quién sabe cuántas veces se habrán cerrado sus ojos ante la evidencia.
Quién conoce cuántos suspiros habrán salido de sus labios.
Un giro brusco de cabeza y la mirada se pierde en mundos infinitos, en los que la posible realidad aflora. Mas todo es un sueño, una imaginación y poco a poco la realidad se hace presa de su ser.
No hay comentarios:
Publicar un comentario